A medida que 2019 llega a su fin, se observan algunas tendencias claras. En primer lugar, la descarbonización se ha convertido en una prioridad para los gobiernos y las industrias como forma de reducir las emisiones. En segundo lugar, garantizar que los recursos puedan reutilizarse y reciclarse significa que la economía circular también ha pasado a ocupar un lugar destacado en la agenda política de todo el mundo. Por último, dado que se necesitará una mayor extracción de recursos, el debate también se ha centrado en cómo la industria puede hacerlo de forma responsable, con el lanzamiento de algunas iniciativas importantes. A continuación se detallan estos tres aspectos clave de 2019.
La descarbonización es una prioridad
Este año se ha puesto de manifiesto el avance hacia la descarbonización, a medida que el mundo se orienta hacia fuentes de energía y transporte más sostenibles. Por ejemplo, la Unión Europea finalizó su Paquete de Energía Limpia para Todos, que incluye objetivos de energía renovable y eficiencia energética, y acaba de publicar un esbozo de un Acuerdo Verde Europeo que contiene el objetivo de ser neutro en carbono para 2050. Mientras tanto, en Estados Unidos se están aplicando políticas para apoyar la expansión de los vehículos eléctricos. Este año, el Comité de Medio Ambiente y Obras Públicas del Senado de los Estados Unidos y el Comité de Energía y Comercio de la Cámara de Representantes aprobaron casi 2.000 millones de dólares para la infraestructura de los VE a través de la Ley de Infraestructura de Transporte de Estados Unidos de 2019 (ATIA) y la Ley de Infraestructura Líder para el Mañana (LIFT) de Estados Unidos, respectivamente.
El abandono de los combustibles fósiles en el ámbito del transporte es otro aspecto de la descarbonización que se está produciendo. El informe Bloomberg New Energy Finance's 2019 EV Outlook mostró que el aumento de los vehículos eléctricos sigue siendo una tendencia mundial. En comparación con 2010, cuando apenas se vendieron unos pocos miles de VE en todo el mundo, en 2018 se vendieron más de 2 millones. Se espera que esta cifra alcance los 10 millones en 2025. Además, el informe prevé que en 2040, el 57% de las ventas mundiales de vehículos de pasajeros nuevos serán VE, lo que supondrá el 30% del parque mundial de vehículos de pasajeros en ese momento.
Estos vehículos eléctricos seguirán necesitando ser cargados con electricidad y es crucial garantizar que los vehículos eléctricos funcionen con fuentes renovables en lugar de con combustibles fósiles. El consumo de energías renovables está aumentando. La Agencia Internacional de la Energía afirma que la capacidad de las renovables aumentará un 50% sólo en los próximos cinco años.
Ambos desarrollos significan que se necesitará más cobre en los próximos años, ya que es un componente clave en los vehículos eléctricos (los vehículos de batería pueden utilizar de dos a cuatro veces más cobre que los vehículos tradicionales) y en muchas tecnologías de energía renovable. Dado que se espera que tanto los vehículos eléctricos como las energías renovables sigan aumentando en las próximas décadas, el cobre tiene su papel en la descarbonización.
La economía circular ocupa un lugar destacado en la agenda política
Está claro que el mundo necesitará más recursos en el futuro porque las nuevas tecnologías que permiten la descarbonización requerirán flujos constantes de materias primas. Esto significa que el reciclaje será cada vez más importante. La economía circular es ya una prioridad política mundial clave, especialmente en Europa, donde se está elaborando un nuevo plan de acción de economía circular.
En el caso del cobre, ya se han hecho progresos. El Grupo Internacional de Estudios sobre el Cobre (ICSG) calcula que, por término medio, el 35% del uso actual del cobre en el mundo procede del cobre reciclado. Algunos actores de la industria ya están trabajando en soluciones para que el sector de las materias primas sea aún más circular.
- En Alemania, Aurubis extrae el excedente de calorsin CO2 de la producción de cobre y lo entrega a HafenCity East, cerca de Hamburgo, a través de una tubería de 3,7 kilómetros (2,3 millas). El proyecto ahorra 20.000 toneladas deCO2al año, lo que equivalea unos 10.000 coches conduciendo 12.000 kilómetros. El proyecto significa que HafenCity East es el primer barrio de la ciudad que se abastece totalmente de calor industrialsin CO2.
- En Bélgica, Metallo sigue innovando para que la producción de cobre sea más circular. Su novedoso horno de plasma permite a la empresa reciclar materiales de baja calidad de forma que puedan convertirse en metales y minerales de alta calidad.
Se necesitarán más iniciativas como estas, así como una mayor atención a la minería urbana, para garantizar una economía totalmente circular. Al mismo tiempo, los responsables políticos tendrán que adoptar un enfoque holístico para garantizar la existencia de un marco normativo adecuado.
Es necesario abordar el abastecimiento responsable y la demanda de cobre
El reciclaje por sí solo no será suficiente para satisfacer la creciente demanda de cobre. En el futuro será necesaria una mayor extracción de recursos. Se prevé que la demanda de cobre por sí sola aumente en torno al 50% en los próximos 20 años.
Sin embargo, algunos se han preguntado si realmente habrá suficiente cobre para satisfacer la creciente demanda en el futuro. La respuesta es afirmativa. Las actuales reservas mundiales de cobre se estiman en 830 millones de toneladas(US Geological Survey [USGS], 2019), mientras que la demanda anual de cobre es de 28 millones de toneladas. Además, según los datos del USGS, desde 1950 siempre ha habido, de media, 40 años de reservas de cobre disponibles y más de 200 años de recursos, que incluyen las reservas, los yacimientos descubiertos y potencialmente rentables y los yacimientos no descubiertos que se predicen a partir de estudios geológicos preliminares. Estos recursos de cobre suman 5.000 millones de toneladas (USGS, 2014 y 2017).
Además, la forma de extracción de este material se ha convertido en una cuestión cada vez más importante. La sostenibilidad y el abastecimiento responsable son dos grandes prioridades para la industria del cobre. Por ello, este año se ha lanzado la Marca del Cobre. Esta iniciativa funciona como un sistema de garantía para la producción responsable de cobre. Introduce una verificación creíble de las prácticas en los centros de producción de cobre, incluidas las minas, las fundiciones y las refinerías, lo que permite tomar decisiones informadas sobre el uso del material y facilita una producción más sostenible en la industria del cobre.
Aparte de esta iniciativa de todo el sector, las empresas individuales también están allanando el camino.
Anglo American estableció requisitos que se espera que cumplan todos sus proveedores, incluyendo la protección del medio ambiente y el respeto de los derechos laborales y humanos, alentando a los proveedores a integrar el principio de "Cero Daño" a las personas, la sociedad y el medio ambiente. Mientras tanto, Teck ha establecido relaciones con los pueblos indígenas en las regiones donde tiene operaciones, incluyendo Canadá, Chile y los Estados Unidos, donde pueden encontrarse dentro de los territorios de los pueblos indígenas o adyacentes a ellos. Por ello, Teck creó una política de empresa para garantizar el respeto de los derechos, culturas, intereses y aspiraciones de los pueblos indígenas, construida en colaboración con sus aportaciones y orientación.
Estas iniciativas representan un punto de partida, pero hay que hacer más para afrontar los retos del abastecimiento y la producción responsables. Esto seguirá siendo una prioridad absoluta en 2020 y después, ya que la sostenibilidad impulsa el debate político en todo el mundo.